"Sapere Aude"


Platón ( c. 428-c 347 a.C)

Platón fue un pensador más sistemático que Sócrates, pero sus escritos, en especial los primeros diálogos, pueden ser considerados como una continuación y elaboración de las ideas socrátistas. Al igual que Socrátes, Platón consideró la ética como la rama más elevada del saber, y subrayo la base intelectual de la virtud al identificar virtud con sabiduría. Esta idea llevo a la llamada "paradoja socrática" por la que ningún hombre hace el mal por propia voluntad, como dice Socrátes en Protágoras. Más tarde, Aristóteles advirtió que una conclusión así no da lugar a la responsabilidad moral. Platón exploró los problemas fundamentales de la ciencia natural, la teoría política, la metafísica, la teología y la epistemología, y enriquecío conceptos que luego han sido fundamentados permanentes en el pensamiento occidental.

La base de la filosofía de Platón es su teoría de las ideas, o doctrina de las formas. La teoría de las ideas (que queda expresada en muchos de sus diálogos, sobre todo en La República y Parménides) divide la existencia en dos esferas o mundos, una "esfera inteligible" de ideas o formas perfectas, eternas e indivisibles, el Topos Uranos, y una "esfera sensible", de objetos concretos y conocidos. Los árboles, las piedras, los cuerpos humanos y en general los objetos que pueden ser conocidos a través de los sentidos son para Platón irreales, sombríos y copias imperfectas de las ideas. Llegó a está, en apariencia, extraña conclusión por las elevadas reglas que adjudicó al conocimiento, por ejemplo, que todos los objetos auténticos de conocimiento fueran descritos sin contradicciones. Como todos los objetos percibidos por los sentidos experimentan cambios, una afirmación hecha respecto a esos objetos en un instante no será válida en un momento posterior. Según Platón, esos objetos no son del todo reales. Las creencias e inconstantes, mientras que los principios de las matemáticas y la filosofía –elaborados a partir de la meditación interior sobre las ideas– constituyen el único saber digno de ese nombre. En La República, Platón muestra la humanidad prisionera en una caverna que confunde las sombras proyectadas en una roca con la realidad; considera al filósofo como la persona que penetra en el universo fuera de la caverna de la ignorancia y alcanza una visión de la verdadera realidad, el mundo de las ideas. El concepto de Platón del bien absoluto –que es la idea más elevada y englobada a todas las demás– ha sido una fuente principal de las doctrinas religiosas panteísta y mística en la cultura occidental.

La teoría de las ideas de Platón y su visión racionalista del conocimiento son la base de su idealismo ético y social. El muendo de las ideas eternas facilita las normas o ideales según los cuales todos los objetos y acciones han de someterse al juicio del hombre. La persona filosófica, que se abstiene de los placeres sensuales y busca en su lugar el principio de los conocimientos abstractos, encuentra en esos ideales los modos para regir la conducta personal y fiscalizar las instituciones sociales. La virtud personal consiste en una armónica relación entre las facultades del alma. La justicia social consiste entonces en la armonía entre las distintas clases de la sociedad. El estado ideal de una mente sana en un cuerpo sano, requiere que el intelecto controle los deseos y las pasiones y las pasiones, así como el estado ideal de la sociedad requiere que los individuos más sabios controlen a las masas buscadoras de placer. Según Platón, la verdad, la belleza y la justicia coinciden en la idea del bien. Por lo tanto, el arte que expresa los valores morales es el mejor. En su programa social, Platón apoyó la censura en el arte, por estimarla como instrumento para la educación moral de la juventud.